Mi abuela se enamoró de mi abuelo a través de mensajes escritos con zumo de limón y leidos en la soledad de una alcoba a la luz de las velas...¿cómo negar algo tan emocionante a mis alumn@s cuando además estamos trabajando los castillos?
Así que manos a la obra con zumo de limón y bastoncillos de los oidos, escribimos mensajes... y después de que secaran los leimos a la luz de las velas.
¡¡Funciona!!
Después de secarse lo pasamos con cuidado por encima de la vela y...magía se leía lo que ponia y se veian sus dibujos.
Ya conocíamos los mensajes secretos del pasado pero...¿y los del futuro?Códigos de barras y códigos Qr...
¿cómo se leen los mensajes secretos del presente?
Probamos con la vela...
Con la lupa...
pero nada era imposible...
Es algo que los mayores llevan en sus bolsos o bolsillos casi siempre...(¡qué lastima!)
en seguida dijeron ¡¡un móvil!!
Y en seguida cojimos la tablet con una aplicación para leer códigos Qr y...
cada uno fue eligiendo su código Qr para pegarlo en el trabajo y cuando vimos que aun nos faltaban algunos ¿ pero cuantos?
A calcular se pusieron rapidamente cada uno cogió el material que quiso para saber cuantos códigos QR faltaban.
¡¡Faltaban 7 !!
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